Promoviendo cambios sostenibles: experiencia en Saltos del Guairá y soluciones privadas para el medio ambiente
Más de 14 horas de viaje, un equipo ampliamente comprometido, las ideas correctas para lograr cambios sostenibles en el tiempo y apertura política para escuchar sobre las mismas, dicha combinación solamente puede desenlazar en actividades que generen impacto y beneficio para aquellos que se encuentran comprometidos con lograr un cambio real.
Eso fue exactamente lo que pudimos vivir el fin de semana pasado, días intensos, descansos cortos, cansancio acumulado, pero un tipo de cansancio que termina siendo gratificante. Trabajar por la promoción de las ideas, de aquellas ideas a las que llamamos de la libertad no es una tarea fácil y muchas veces hasta resulta frustrante. Esa sensación de frustración se debe a que por más que los datos demuestran que son las adecuadas para lograr mayores beneficios para la sociedad, que es un cúmulo de individuos, no se materializan porque dependen de la voluntad de aquellos quienes toman las decisiones.
Sin embargo, desde la primera visita que realizamos, como equipo, a la ciudad de Saltos del Guairá nos topamos con otra realidad, una ciudad joven, con 50 años de haberse fundado, representantes gubernamentales con el interés de escuchar otras corrientes, otras ideas, todo con tal de analizar si lo propuesto puede contribuir a lo que tanto nos han comentado en todas nuestras visitas, lo cual es lograr el desarrollo.
Es por esa razón, que como organización habíamos tomado la decisión de realizar más actividades en dicha localidad, llevar expertos sobre diferentes temáticas, para que los mismos puedan exponer desde sus conocimientos cuáles son aquellas ideas que se han materializado en otros países, que han sido casos de éxito y analizar de qué manera pueden implementarse localmente.
Generalmente, los políticos se consideran como una casta superior, infalibles, semidioses a los cuales hay que rendir pleitesía o tributos para poder lograr un acercamiento. Más, tuvimos la oportunidad de conocer personas excelentes, cálidas al punto de recibirnos en sus hogares y prácticamente exigirnos a quedarnos a almorzar, escépticas pero abiertas a escucharnos, esa situación fue la que reavivó el sentimiento de que aquello a lo cual nos dedicamos hace 5 años está rindiendo sus frutos.
Fue por esta razón, que me había contactado con Edwin Zarco, especialista peruano en medio ambiente y máster en economía de la escuela austríaca, a quien le pregunté si tenía la posibilidad de visitar el Paraguay, específicamente la ciudad de Saltos del Guairá, tarea nada fácil teniendo en consideración la distancia en la que se encuentra de la capital del país. Él aceptó y fue así que con el apoyo de personas y organizaciones locales de dicha ciudad llevamos a cabo la conferencia "Problemas medioambientales y derechos de propiedad".
El evento, podría catalogarlo de exitoso, cosa que muy pocas veces lo hago. Tomando en cuenta que era sábado, por la tarde, en donde la mayoría está analizando dónde salir o qué hacer en la noche. Tuvimos más de 70 personas, el auditorio lleno, los participantes curiosos, deseosos de aprender más, reclamando el poco tiempo que duró, sin que se dieran cuenta que en total estuvieron dos horas en aquel recinto. El disertante, con ganas de retornar al país.
Ahora, por qué como organización preocupada por el contribuyente abordamos la cuestión medioambiental, la respuesta más sencilla es porque es el tema en boga de un tiempo a esta parte. La respuesta más elaborada estriba en que las soluciones propuestas para remediar los problemas que afectan al medioambiente generalmente son proyectadas desde la mirada gubernamental o desde la perspectiva de la "Weltinnenpolitik" (políticas internas globales), lo cual indefectiblemente implica afectar al contribuyente a través de regulaciones o disposiciones. De esta manera unimos dos esferas, la protección del contribuyente y la del medio ambiente, demostrando cómo las soluciones privadas superan por demasía a las soluciones estatales. Y no lo decimos solo por decir, sino que Edwin se encargó de demostrar con ejemplos y datos cuáles son las soluciones que proporcionan mejores resultados para la problemática señalada.
Pero, si se analiza lo anterior, entonces ¿cuál es la función de aquellos legisladores? Ellos tienen la delicada función de establecer que las reglas de juego sean las más claras, asequibles y con resultados esperados, generando incentivos fiscales para el logro de las mismas.
¿Y ahora qué? Efectivamente esto no se puede únicamente en una charla, en algo que probablemente los participantes terminarán olvidando, teniendo como recuerdo aquel certificado que obtuvieron por participar. Como todo en la vida, hay que pasar de las palabras a la acción, a un marco de acciones concretas que puedan generar ese cambio, esas modificaciones que puedan generar el bendito desarrollo que todos queremos.